No lo rellenes por rellenar, por parecer ocupado. Supones que algo productivo debes estar haciendo, pero ¿el qué?. Buscas un tarea sencilla por hacer hasta que comience el próximo sprint y te dispones a hacerla. Después de todo, no vas a estar de brazos cruzados, ¿no? Además, siempre puedes sumar un punto fácil en el sprint actual.
El problema es que casi cualquier cosa que hagas, por pequeña que sea, tiene un coste de mantenimiento, de desarrollo, de errores inesperados, de cambios solicitados después. Tiempo para mostrala en la demo, para revisarla, para corregirla y un largo etcétera. ¿Y si no la entendiste bien o no era tan fácil como parecía? ¿Por qué abrir ese melón?
Parecerás estar ocupado, pero si lo que haces no aporta valor, ¿para qué lo haces? Cada línea de código que produces tiene un coste, son inventario que hay que mantener, que actualizar si otra parte cambia,… Es como el material que produces en una fábrica, para qué lo produces ¿para mantenerlo guardado en el almacén? Eso cuesta dinero. Y Producirlo también.
Comenzar cosas hará que se empleen tiempo y recursos en algo que probablemente quede a medio, que se oxide con el paso del tiempo, que pierda valor y que nadie recuerde cuando se vuelve a retomar. Es como comenzar a abrir fruta, pero solo comer un poco. Luego abres otra y otra, pero no terminar ninguna.
Podrías además estar causando un cuello de botella en un sección diferente u obligando a que otro departamento dedique su tiempo o sus recursos a manejar eso que produces (como al departamento de Calidad o de Operaciones). Si nadie tiene verdadero interés en lo que has hecho, mantener a los «obreros» ocupados te hará sentir mejor, pero te estará causando perjuicio. Es mejor que estén holganazeando, suena mal, incluso es contraintuitivo, pero realmente te costará menos.
Siempre podrás dedicar ese tiempo a un spike, a estudiar lo próximo que vas a comenzar, o a preparar el terreno para lo que necesites. Seguro que encuentras un montón de cosas por hacer. Aunque no vayan a sumar puntos en el sprint actual, ganarás tiempo para el próximo, dónde sí que podrás avanzar mejor con el camino ya asfaltado.
Seguro que conoces esa alegoría popular en las redes sociales, sobre un profesor que enseña a sus estudiantes que un tarro lleno de piedras de diferente tamaño, incluso con arena, siempre puedes terminar de llenarlo con un par de cafés (aunque ya pareciera abarrotado).
Ese símil también nos vale para estas situaciones: si rellenas el tarro con las tareas pequeñas, la arena, nunca habrá hueco para las piedras grandes y de valor. Siempre se retrasa el inicio de la tareas importantes: se está distraido con los pequeños detalles. Para los grandes proyectos nunca se encuentra tiempo. Su slot está ocupado por asuntos diminutos que no están, ni de lejos, entre los objetivos de tu empresa.
Rellenar tu tiempo con cualquier cosa hará que engordes inutilmente tu producto. Haz dieta y evita caer en la tentación de mantenerte ocupado con tareas de poco valor.
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